Hoy Apple ha empezado a poner las cartas sobre la mesa con respecto al nuevo “batterygate”, el caso de los iPhone que se ralentizan cuando sus baterías pierden poder de carga y que le ha supuesto a Apple numerosas quejas, críticas en los medios y hasta demandas colectivas por haber incorporado “como medida de protección” una limitación del rendimiento de los iPhone 6, 6s e iPhone 7 con baterías ya deterioradas. La compañía ha anunciado que a partir de finales de enero habrá una actualización de iOS que dará mejor información sobre el esatdo de tus baterías e iniciará un programa de reemplazo oficial de las baterías de los iPhone afectados por un precio de 29 dólares (en España este servicio cuesta ahora 89 euros, de manera que es una rebaja muy sustancial). Sin embargo, ¿cómo puedes saber si tu iPhone está yendo más lento por causa de las baterías o si es que sencillamente hay algo que no funciona? Pues la propia Apple ha publicado hoy una lista de posibles síntomas que pueden indicar que tu iPhone está siendo “ralentizado” por culpa de una batería gastada.
Según explica la propia Apple en su web de soporte, algunos de los síntomas que pueden estar evidenciando que la batería ya no tiene el poder de carga adecuado son los siguientes:
- Tiempos de apertura de aplicaciones más largos de lo normal
- Frecuencias de refresco más bajas al desplazarse, por ejemplo en una página web o al desplazarse entre las pantallas del escritorio
- Oscurecimiento de la retroiluminación de la pantalla (es decir un brillo más bajo de lo habitual)
- Reducción del volumen del altavoz hasta -3dB (es decir un volumen notablemente más bajo)
- Reducciones graduales de velocidad de fotogramas en algunas aplicaciones (por ejemplo en juegos o aplicaciones de gran contenido gráfico)
- En los casos más extremos, el flash de la cámara puede desactivarse y no mostrrase en la interfaz de la cámara
- Las aplicaciones que se refrescan en segundo plano pueden requerir recargarse cuando las vuelves a activar
Por otro lado, Apple asegura que hay áreas en las que esta ralentización o sistema de protección no debería afectar o tener impacto como son la siguientes:
- Calidad de las llamadas y rendimiento de la conexión de red
- Calidad de las fotos y los vídeos capturado
- Rendimiento del GPS y precisión de ubicación
- Sensores como el giroscopio, acelerómetro o barómetro deben funcionar con la misma precisión
- Apple Pay, debe seguir funcionando con la misma fiabilidad
Así, si tu iPhone ya no tiene la autonomía de antaño y sufre alguno de los primeros síntomas, es posible que sea de los que están afectados por la ralentización del sistema y puede ser candidato a primeros de enero para el anunciado cambio de batería por 30 dólares (se desconoce el precio en nuestro territorio pero se espera que ronde los 40 euros). Por otro lado, si lo que falla es alguno de los aspectos mencionados en la segunda lista, es probable que tenga un problema de otro tipo que no va a resolverse con el recambio de la batería.
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